Bueno, nos lo pasamos bien y eso, sí. Pero que luego fue brutal todo lo que pasó. Y todo a la vez, que fue peor.
Ayer empezaron las fiestas de aquí, y como era el cumple de Javi, pues fuimos al Telepizza y luego a la feria un rato. Originalmente íbamos Sergio, Miriam, Mary, Javi, Abi, Sara (una vecina de Javi), Diego (el primo de Sara, que se tuvo que venir), Peña, Carvajal, Z, Izamar y un tal Raul. Al final estos tres últimos se fueron antes de ir a la feria, y nos quedamos los demás.
Bien, estuvimos por allí deambulando entre máquinas (aunque Javi, Juanelo, Carvajal y Peña se fueron a por un litro [a las 10 de la noche...]) hasta más o menos las doce y media, que nos fuimos para las peñas, que son donde hay fiesta, marcha y alcohol. Alcohol a menores, por cierto, que también lo hay.
Los otros cuatro ya iban por su tercer litrona de Martini cuando nosotros pedimos el primero, a medias entre Sergio, Miriam y yo (aunque nosotros pedimos J&B). A parir de ahora lo pondré como una lista, porque fue... demasiado puntual.
- · A la una y media, Miriam le dice a peña que haga el cuatro con el cuerpo. Peña se cae.
- · Javi empieza a torear a Carvajal.
- · Mary empieza a arrimarse mucho a Diego.
- · Sergio y yo bailando reggaetón contra el hermano de Sergio y su amigo (una especie de reto).
- · Sergio y yo vamos a por un par de chupitos. El camarero me guiña un ojo. Me siento halagado.
Conseguimos hacer que parezcan sobrios cuando pasamos frente a la policía, y acto seguido hacemos parada los chicos para echar un pis.
- · Peña casi se cae, y por consiguiente casi me toca sujetársela. Por fortuna, pudo mantenerse en pie.
- · Carvajal, "¡Que viva la República!". Casi se moja por levantar el puño.
Seguimos, Sergio y yo llevando a Peña y Juanelo llevando a Carvajal. Peña opina que Sergio es un cabrón, porque tiene una novia que está buenorra. Sergio se siente halagado, pero resiste la tentación de romperle la mandíbula.
Miriam llama a su padre, que pasará a por Mary y a por ella. Miriam reza por que Mary no hable más de lo normal en el coche. Por fortuna no lo hizo.
Vamos hasta casa de Carvajal, que el pobre va calladito pero lleva una cogorza encima que va haciendo eses (aunque no llegaba al nivel de Peña). Le ayuda Sergio a subir a su casa, y nos quedamos abajo los otros tres. Sergio dice que consiguió abrir la puerta él mismo. Peña vomita, somos felices.
Conseguimos subir entre Juanelo y yo a Peña hasta su casa: un tercer piso sin ascensor. A él parece que le hace mucha gracia, porque no deja de reir. Le tenemos que abrir la puerta, pero entra y nos saca el pulgar. "Si, eso te vamos a meter por el ojo" pienso yo.
Ya no mucho más. Sergio obsesionado con que va ebrio, pero va completamente sobrio. Juanelo ídem, pero a él le da igual.
Resultado de la noche: catastrófico.
Aunque, como dice Sergio, no la cambiaría por nada. Es de esas experiencias que nunca está de más recordar (los que íbamos sobrios, porque los otros recordar más bien poco).
Hoy también hay canción, para no variar. Hoy toca La Oreja de Van Gogh. Coronel, una canción que me emociona. El video está hecho a conciencia, con imágenes que ilustran la canción (al menos la parte que he visto). Enjoy it.
Agur!